PUESTA EN ESCENA

Después de escuchar las correcciones de la primer entrega, decidimos hacer un plano un poco más abierto, para darle más profundidad. A su vez, queríamos darle un poco más de contexto a la situación, por lo que decidimos incluir un cuchillo ensangrentado, dándole más sentido a la situación. Probamos fotografiar el frame desde diferentes ángulos, jugando también con las luces e intentando dar más profundidad. Intentamos hacer algunas fotos desde la puerta del baño, en donde pusimos huellas de sangre provenientes de los pies de la protagonista, pero no quedaron bien. Era difícil que entre en el mismo cuadro el piso con las huellas y que, a la vez, se vea el agua rojiza de la bañadera. Las fotos que más nos gustaron, fueron las que sacamos desde arriba. Sentimos que lograron captar lo siniestro de la situación y a su vez, reflejan el conflicto interno que ella está atravesando.